Ponte a pensar la emoción que te mueve y todo lo que haces para planear un festejo especial, pues es así como debes de planear tu vida.

Primero necesitas esa alegría, ese entusiasmo que hace que planees cada detalle minuciosamente y poniendo toda tu creatividad y cariño en ello.

Segundo, haz bien la lista de tus invitados, escoge a los más especiales para que estén contigo en el trayecto, recuerda, por mucho compromiso que tengas puedes prescindir de todos aquellos que no te convengan.

Como todo festejo, levántate cada día pensando en tu mejor atuendo, báñate y arréglate para el mejor día de tu vida, recuerda que el mejor accesorio será tu sonrisa y tu buena actitud.

Escoge bien la música de fondo y todos los detalles, aliméntate bien, realiza las actividades que te gustan y celebra cada logro alcanzado. Baila y canta mucho, eso definitivo alegra el alma.

Al final de cada día, agradece los obsequios recibidos, si, las bendiciones, el estar vivo, el tener un techo, el estar con los tuyos, el tener salud, etc., etc., etc.

¡Que genial, es así como quiero vivir cada día de mi vida!

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